En la Recomendación UIT-T Y.4459 se presenta una arquitectura de entidad digital destinada a garantizar la interoperabilidad y la seguridad entre aplicaciones de Internet de las cosas (IoT). En esta Recomendación se define un marco arquitectónico para servicios de información que utiliza las infraestructuras existentes, incluida la infraestructura de Internet, para aumentar la seguridad y la compartición de información gestionada en un entorno de red distribuida. Se definen un marco arquitectónico para la gestión de información basada en el empleo de entidades digitales y un conjunto común de servicios seguros, que facilitarán el registro, el descubrimiento, la resolución y la divulgación de esas entidades digitales. El conjunto de servicios está diseñado para facilitar la compartición traspasando cualquier límite de almacenamiento, cualquier límite de aplicaciones heterogéneas y cualquier límite de organización. Una arquitectura de entidad digital define un conjunto mínimo de componentes arquitectónicos y servicios necesarios para garantizar la interoperabilidad genérica de informaciones y servicios. Facilitará la interoperabilidad de la identificación, la descripción, la representación, el acceso, el almacenamiento y la seguridad de los dispositivos IoT. Este marco arquitectónico es propicio a una interfaz común de seguridad y gestión entre distintas aplicaciones IoT. Dentro de una arquitectura de entidad digital, la información representada en forma digital se estructura como entidades digitales, cada una de las cuales está asociada a un identificador unívoco permanente. Sin embargo, es posible actualizar los metadatos de las entidades digitales (por ejemplo, ubicación del objeto) sin modificar su identificador. El identificador permite identificar y descubrir las entidades digitales, independientemente de donde se encuentren o estén almacenadas. Las entidades digitales no están confinadas dentro de un límite de aplicación concreto y pueden moverse de un anfitrión a otro, se puede acceder a ellas de una aplicación a otra, pueden compartirse entre organizaciones, y todo ello sin perder su propiedad o el control de la gestión, a fin de aumentar la interoperabilidad. El modelo de datos de entidades digitales permite a los propietarios de los datos definir su propiedad e información de control de acceso con independencia de cualquier aplicación específica. Esta Recomendación puede utilizarse con distintos protocolos de identificación y direccionamiento (por ejemplo, redes del protocolo Internet (IP) y/o no basadas en IP). |