Hacia un enfoque común para contrarrestar la desinformación en línea
Lituania, Ucrania, Polonia, Letonia, Japón, Delegación de la Unión Europea en Ginebra
Sesión 404
Introducción y contexto
La desinformación ha sido ampliamente reconocida entre las principales amenazas modernas. Afecta a las sociedades y al funcionamiento de las democracias en todo el mundo y, con la profusión de canales de comunicación y los avances en la tecnología digital, se propaga rápidamente y amenaza el compromiso político, profundiza la desconfianza hacia las instituciones y procesos democráticos, corre el riesgo de una mayor polarización en las sociedades y limita la libertad. de las personas para buscar, recibir y difundir información, incluso en tiempos de emergencia, crisis y conflicto armado, cuando dicha información es vital.
Desde apagones de Internet hasta campañas de desinformación, la tecnología digital suele ser discriminatoria y perjudicial para los derechos humanos. La información inventada o falsa a veces se mezcla con hechos verificados, lo que aumenta aún más su impacto socavador. La manipulación de la información distorsiona el discurso cívico y la integridad del entorno de la información a través de la distribución de contenido no auténtico o manipulado (a través de cuentas falsas, divulgación no auténtica, etc.) o la supresión de voces alternativas. La difusión de desinformación, incluso en Internet, puede estar diseñada deliberadamente para incitar a la violencia, el odio, la discriminación o la hostilidad tanto entre las naciones como dentro de las sociedades.
Avances recientes en el contexto de la ONU
El efecto dañino de la desinformación se ha vuelto especialmente visible desde el comienzo de la pandemia de COVID-19. En respuesta, la ONU lanzó en mayo de 2020 la iniciativa "Verificado" destinada a abordar el creciente flagelo de la desinformación de COVID-19 al aumentar el volumen y el alcance de información confiable y precisa. La situación se agravó aún más con los intentos de silenciar las fuentes de información objetiva sobre la guerra de Rusia en Ucrania y, en cambio, lanzar una campaña de desinformación masiva en Rusia, Bielorrusia y en todo el mundo.
En 2020, la Unión Internacional de Telecomunicaciones publicó una investigación "Acto de equilibrio: contrarrestar la desinformación digital respetando la libertad de expresión" sobre cómo los Estados, las empresas, las instituciones y las organizaciones de todo el mundo están respondiendo a la desinformación, que concluyó que la desinformación no se puede abordar en ausencia de preocupaciones sobre la libertad de expresión y subrayó la importancia del acceso a información fiable y fidedigna para contrarrestar la desinformación.
En junio de 2021, la Relatora Especial de la ONU sobre la promoción y protección del derecho a la libertad de opinión y expresión, Irene Khan, presentó su informe sobre Desinformación y libertad de opinión y expresión al Consejo de Derechos Humanos de la ONU. El informe examinó las amenazas que plantea la desinformación a los derechos humanos, las instituciones democráticas y los procesos de desarrollo.
En diciembre de 2021, la Asamblea General de la ONU adoptó una resolución 76/227 sobre “Lucha contra la desinformación y promoción y protección de los derechos humanos y las libertades fundamentales”.
Más recientemente, en marzo de 2022, la cuestión del papel de los estados para contrarrestar el impacto negativo de la desinformación en el disfrute y la realización de los derechos humanos se abordó en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU mediante la adopción consensuada de una resolución 49/21 .
Objetivo del evento
El evento tendrá como objetivo identificar puntos de convergencia, mejores prácticas y posibles formas de avanzar para una mayor sinergia entre el sistema de la ONU, los estados y otras partes interesadas relevantes para contrarrestar la desinformación en línea.
Preguntas orientadoras
- ¿Cómo podríamos garantizar mejor que los esfuerzos para contrarrestar la desinformación incorporen un enfoque basado en los derechos humanos?
- ¿Cómo puede contribuir el establecimiento de estándares digitales al entorno en línea basado en hechos?
- ¿Cómo puede contribuir la comunidad internacional a promover el enfoque común para contrarrestar la desinformación en línea?
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Después del evento, la Misión Permanente de Lituania ofrecerá una pausa para el café.
Después de estudios de derecho enfocados en derecho internacional en Lituania y el Reino Unido, el Sr. Staniulis se unió al Servicio Diplomático de Lituania en 1993 y ocupó diferentes puestos en el MFA, así como en el Consulado General en Nueva York, la Misión Permanente en Ginebra y el Representación Permanente ante la Unión Europea. También fue adscrito a la Misión de la OSCE en Georgia.
En enero de 2022, el Sr. Staniulis asumió sus funciones como Embajador Extraordinario y Plenipotenciario y Representante Permanente en la Misión Permanente de la República de Lituania ante la Oficina de las Naciones Unidas y otras organizaciones internacionales en Ginebra.
En 1996, la Embajadora Filipenko se incorporó al Servicio Diplomático de Ucrania, donde ocupó varios cargos en el Ministerio de Relaciones Exteriores y en el extranjero, en Nueva York, Viena y Belgrado.
Se graduó de la Universidad Nacional Taras Shevchenko de Kyiv y tiene un certificado de posgrado de la Universidad de Oxford.
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Eglė Markevičiūtė es Viceministra de Economía e Innovación de la República de Lituania desde diciembre de 2020. Antes de eso, fue cabildera, tenía su propio negocio, fue Oficial Principal de Economía e Inversiones en la Administración Municipal de la Ciudad de Vilnius.
Se graduó de la Universidad de Vilnius, donde completó estudios de licenciatura y maestría con un enfoque en Ciencias Políticas.
Coautor del libro 'Lituania 2120'.
Desde enero de 2016, Peggy Hicks se ha desempeñado como directora de la División de Participación Temática, Procedimientos Especiales y Derecho al Desarrollo de la Oficina de Derechos Humanos de la ONU (ACNUDH). Brinda dirección estratégica al trabajo de la Oficina de Derechos Humanos de la ONU en una amplia gama de cuestiones apremiantes de derechos humanos, incluidos los derechos humanos en la era digital. De 2005 a 2015, fue directora de incidencia global en Human Rights Watch, donde fue responsable de administrar el equipo de incidencia de Human Rights Watch y de brindar orientación a su incidencia en todo el mundo. La Sra. Hicks se desempeñó anteriormente como directora de la Oficina de Retornos y Comunidades en la misión de la ONU en Kosovo y como Alta Representante Adjunta para los Derechos Humanos en Bosnia y Herzegovina. También ha trabajado como Directora de Programas para el Grupo de Derecho Internacional de Derechos Humanos y como profesora clínica de derechos humanos y derecho de refugiados en la Facultad de Derecho de la Universidad de Minnesota. La Sra. Hicks se graduó de la Facultad de Derecho de Columbia y de la Universidad de Michigan.
Lutz Güllner trabaja en el Servicio Europeo de Acción Exterior, donde es Jefe de División de Comunicaciones Estratégicas y Análisis de la Información. Dirige un equipo de unas 35 personas que se ocupan de cuestiones relacionadas con la desinformación y la interferencia manipuladora extranjera. En su trabajo, se centra en abordar las amenazas de desinformación para la UE y para la región vecina de la UE. Antes de ocupar su cargo actual, se desempeñó como jefe del equipo de comunicación de política exterior y de seguridad del EEAS y como jefe del equipo de comunicación de la Dirección General de Comercio de la Comisión Europea. También fue Jefe Adjunto de la Unidad de Estrategia Comercial y responsable de la coordinación de las relaciones comerciales y económicas UE-EE.UU. En 2009 y 2010, Lutz Güllner fue portavoz de la Alta Representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Catherine Ashton. También fue el portavoz de la Comisión para la política comercial. En cargos anteriores, estuvo a cargo de las relaciones económicas entre la UE y Rusia. Estudió ciencias políticas y relaciones internacionales en la Universidad Libre de Berlín y en el Institut d'Etudes Politiques (Sciences Po) de París. Enseña política comercial y asuntos exteriores de la UE en el programa de estudios de posgrado para estudios europeos en Berlín.
Paula Gori es Secretaria General y Coordinadora del Observatorio Europeo de Medios Digitales. Se incorporó a la Escuela de Gobernanza Transnacional del Instituto Universitario Europeo en 2017, donde es miembro del equipo directivo. Anteriormente fue Coordinadora de la Escuela de Regulación de Florencia - Comunicaciones y Medios, que ofrece actividades de capacitación, política e investigación sobre regulación y competencia de comunicaciones electrónicas y colaboró con el Centro para el Pluralismo de Medios y Libertad de Medios, que coordinó durante el conjunto inicial. en 2012. Fue durante varios años la coordinadora científica de la Conferencia anual sobre economía postal y de entrega y es una de las autoras del informe para la Comisión Europea sobre las competencias de la Unión Europea con respecto al pluralismo y la libertad de los medios. . Paula tiene experiencia legal y es mediadora civil calificada.
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C3. Acceso a la información y al conocimiento
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C4. Creación de capacidades
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C6. Entorno habilitador
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C8. Diversidad e identidad culturales, diversidad lingüística y contenido local
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C9. Medios de comunicación
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C11. Cooperación internacional y regional
El evento tiene como objetivo identificar puntos de convergencia, mejores prácticas y posibles formas de avanzar para una mayor sinergia entre el sistema de la ONU, los estados y otras partes interesadas relevantes para contrarrestar la desinformación en línea.
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Objetivo 9: Construir infraestructuras resilientes, promover la industrialización inclusiva y sostenible y fomentar la innovación
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Objetivo 16: Promover sociedades pacíficas e inclusivas para el desarrollo sostenible, facilitar el acceso a la justicia para todos y crear instituciones eficaces, responsables e inclusivas a todos los niveles
La desinformación afecta a las sociedades y al funcionamiento de las democracias en todo el mundo y, con la profusión de canales de comunicación y los avances en la tecnología digital, se propaga rápidamente y amenaza el compromiso político, profundiza la desconfianza hacia las instituciones y los procesos democráticos, corre el riesgo de aumentar la polarización en las sociedades y limita la libertad. de las personas para buscar, recibir y difundir información, incluso en tiempos de emergencia, crisis y conflicto armado, cuando dicha información es vital. Por lo tanto, contrarrestar la desinformación es un elemento clave para promover sociedades justas, pacíficas e inclusivas.