Día Mundial de las Telecomunicaciones 1999

IHT 17 de mayo de 1999


Fin del desequilibrio de información

La inversión en tecnología de la información se está haciendo cada vez más esencial en los países en desarrollo.


Una de las grandes preocupaciones de los políticos y científicos es que en la sociedad de la información se mantengan las desigualdades de la sociedad industrial traducidas en ''poseedores'' y ''desposeídos'' de información. Los primeros disfrutarían de la información más rápida, más reciente y mejor cursada por una infraestructura sofisticada, con un contenido orientado a las necesidades locales y costes aminorados por un mercado competitivo.

Los últimos carecerían de todo ello; su acceso a la información sería limitado y costoso, y el contenido impuesto por mercados diferentes del propio.

Esto no sólo inquieta a los soñadores utópicos; los comerciantes y consumidores de todas partes pagarían el precio económico y social de dicha disparidad. ''El problema de los ''desposeídos'' siempre ha existido, pero ahora presenta una nueva cara'', explica Ben Petrazzini, analista de políticas de la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT).

La aceleración del cambio tecnológico y social amenaza con ampliar el desequilibrio más rápidamente que en el pasado.

Al mismo tiempo, aun los países relativamente pobres pueden crear nuevas oportunidades económicas si se suben al tren del comercio electrónico. ''Por ejemplo'', prosigue el Sr. Petrazzini ''con unos gastos de capital relativamente bajos, puede tenerse una industria de procesamiento de datos, centros de llamada u oportunidades de prestación de servicios''.

Bajo los auspicios de la Organización Mundial del Comercio, se han alcanzado acuerdos que liberalizan el 95% del mercado mundial de telecomunicaciones, finanzas y tecnología de la información, por valor superior a un billón de dólares.

Infraestructura electrónica

La enormidad y la repercusión del mercado aconsejan la inversión en información, y las tecnologías de telecomunicaciones son un requisito previo para el desarrollo económico amplio algo vital para muchas organizaciones y grupos empresariales.

Uno de los más modernos es el Global Business Dialogue, un grupo impulsado por la industria, que celebró su primera reunión a comienzos de 1999. Aunque sus miembros son principalmente grandes empresas del mundo desarrollado, también hay representantes de países en desarrollo y pequeñas y medianas empresas. ''Se hizo deliberadamente para tener en cuenta sus puntos de vista'', explica Bill Poulos, Director de política de comercio electrónico de la compañía asociada Electronic Data Systems.

Global Business Dialogue ayuda a conformar la política participando en los debates de la Organización de Cooperación y Desarrollo Económicos, la Unión Europea y otras organizaciones que participan en las decisiones relativas al comercio electrónico. El Sr. Poulos señala, ''Es fundamental para la industria desarrollar futuros mercados, de ahí el interés en los países ''desposeídos''''.

No considera que la financiación sea un problema esencial. Aunque los propios recursos o la ayuda extranjera directa, no siempre bastan los inversores privados pueden colmar esta brecha. ''El dinero existe'', afirma. ''La cuestión es saber si el clima es favorable a la inversión ''.

El mes pasado James Wolfensohn, Presidente del Banco Mundial señaló en este sentido que han de existir ''mecanismos para mantener el interés de los inversores en los países en desarrollo''. Sin dicho mecanismos, dijo, muchos inversores evitarían los países de riesgo, que dependen del capital extranjero para financiar la expansión económica.

Las preocupaciones de los inversores disminuyen con la competencia que agiliza la creación de la infraestructura.

La competencia requiere mercados abiertos y reglamentadores estrictos, dice el Sr. Petrazzini, y además disminuye los precios para los usuarios.

La infraestructura básica de telecomunicaciones no basta. Los servicios de telecomunicaciones deben tener precios asequibles, si no se quiere impedir el acceso, dice el Sr. Petrazzini.

Los costes incluyen soporte físico, acceso y gastos en telecomunicaciones. En algunos países, el precio de una línea arrendada internacional puede llegar 11 000 dólares frente a los 300 dólares en Estados Unidos.

ƒste es un gran impedimento para los comienzos del comercio electrónico.

El descenso espectacular de los precios de los ordenadores lleva a los países en desarrollo a cambiar equipo por información. Pronto según los analistas dispondremos de otros dispositivos ''dispositivos de información'' a bajo coste. Los gastos de acceso y de telecomunicaciones caerán con la competencia promovida por los reguladores.

Los gobiernos y los comerciantes tienen que cooperar, opina la Internet Society, una organización no gubernamental para la coordinación y cooperación mundiales en Internet. Mantiene que la educación es tan importante como un clima propicio a la inversión. ''Se necesitan especialistas para dirigir estas redes'' afirma Martin Burack, Director Ejecutivo de la organización.

El Sr. Poulos de EDS especifica que la alfabetización técnica ''significa más que saber cómo utilizar un computador; se trata de saber cómo impulsar la tecnología de la información en el comercio''. Cree que la eliminación del desequilibrio entre los poseedores y los desposeídos depende de que estos últimos adquieran una comprensión de ''las reglas del juego, la transparencia, la educación y el desarrollo de las capacidades laborales''.

Es optimista en que así ocurrirá, ''porque esta tecnología se presta a un rápido cambio, por lo que creo que el progreso se producirá más rápidamente de lo que cualquiera ha podido soñar''.

Claudia Flisi