La gestión efectiva de una red exige la subdivisión de la misma de una manera que refleje las agrupaciones organizativas y funcionales. Ejemplo de agrupación organizativa es la subdivisión de los objetos gestionados en grupos que sigan algún criterio lógico, o conveniente (por ejemplo, geográfico o de otro tipo). Ejemplo de agrupación funcional es la subdivisión de los objetos gestionados según la actividad de gestión o las zonas funcionales de responsabilidad (por ejemplo, averías, configuración, contabilidad, calidad de funcionamiento y seguridad).
En la práctica, ambos aspectos están relacionados y es preciso controlar en el tiempo y de manera flexible las creaciones, las modificaciones y sus relaciones. Se requieren mecanismos adicionales que permitan la aplicación y gestión de políticas a esas agrupaciones. El siguiente es un ejemplo de política en este contexto: un grupo de sistemas gestionados debe enviar informes de averías al sistema gestor "x" entre las 08:00 y las 18:00 horas, y al sistema gestor "y" durante el resto del tiempo.
Las Recomendaciones X.701 y X.749 proporcionan un método basado en las Recomendaciones X.700 para satisfacer dichas necesidades sobre la base de definir subdivisiones de objetos gestionados como dominios de gestión, políticas como objetos de política de gestión y la intersección de unas y otras como una jurisdicción de gestión.
Los mensajes y la información de gestión se definen para controlar la creación de dominios y cualesquiera modificaciones ulteriores de dichos dominios mediante mensajes basados en la Recomendación X.700.