Un ejemplo a menudo citado para ilustrar la complejidad de una operación de socorro internacional cuando ocurre una catástrofe es el del niño refugiado hambriento y enfermo. Del hambre se encarga una organización especializada de las Naciones Unidas, el Programa Mundial de Alimentos (PMA), y numerosas organizaciones no gubernamentales (ONG) especializadas. La Organización Mundial de la Salud (OMS) se ocupa de los problemas médicos de las personas afectadas, en especial los refugiados. Pero la situación de estos últimos también incumbe a la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR). Cuando más concretamente los beneficiarios son los niños, la asistencia corre a cargo del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) así como de varias ONG especializadas. Tratándose de educación, la labor recae en la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO).
A estos organismos especializados en las operaciones de socorro tenemos que añadir las instituciones y organizaciones a escala regional, nacional y local. Y como la catástrofe no sólo afecta a los niños sino a toda la sociedad, sin olvidar a los grupos particularmente vulnerables como las personas mayores o los discapacitados, el número de colaboradores en dichas tareas se multiplicará. Todos ellos, que enviarán a sus especialistas a la zona siniestrada, disponen de oficinas nacionales regionales, y también sedes en diferentes continentes: el PMA en Roma (Italia); la OMS y el ACNUR en Ginebra (Suiza), la UNICEF en Nueva York (EE.UU.) y la UNESCO en París (Francia). A estas organizaciones se suman el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) y la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja (IFRC), ambas con sede en Ginebra, así como los servicios de socorro nacionales de los 5 continentes que intervienen a menudo en operaciones de emergencia internacionales. Todo ello da una idea de la complejidad de la coordinación, con las consiguientes necesidades en materia de telecomunicaciones.