En esta Recomendación se define la arquitectura del plano funcional distribuido (DFP) de la red inteligente (RI) dentro del marco general del modelo conceptual de la RI descrito en las Recomendaciones I.312 y Q.1201. Por tanto, esta Recomendación proporciona la base para la elaboración de las Recomendaciones Q.12x4, destinadas a especificar el DFP RI para un determinado conjunto de capacidades x (CS-x).
Esta Recomendación constituye la base de las Recomendaciones Q.12x4 porque:
– define la arquitectura DFP RI en términos de agrupamientos de funcionalidad, denominados entidades funcionales, y de los flujos de información que se establecen entre entidades funcionales, denominados relaciones;
– identifica los temas de estudio que requiere el modelado de las entidades funcionales relacionadas con el procesamiento de la lógica de llamada/servicio soportado por la RI para determinar la índole de las relaciones que se establecen entre ellas; y
– proporciona instrumentos para modelar las entidades funcionales de una manera que responda a los objetivos de la RI, y sea adecuada para un conjunto determinado de capacidades.
Si bien la arquitectura DFP RI y los instrumentos de modelado de esta Recomendación han demostrado ser extremadamente útiles para avanzar en la normalización de la RI, no representan necesariamente una visión definitiva de la evolución de la RI. Así pues, en esta Recomendación se plasman los conceptos actuales, que podrán tener que perfeccionarse a medida que se vaya conformando la visión definitiva de la RI.
Entre las Recomendaciones de la serie Q.120x, esta Recomendación describe la distribución de la funcionalidad del plano funcional global definido en las Recomendaciones I.329 y Q.1203 (o sea, los bloques constructivos independientes del servicio) de manera independiente del servicio y del vendedor o la realización. Ello proporciona flexibilidad para asignar la funcionalidad distribuida en múltiples configuraciones físicas de red, como se describe en la Recomendación Q.1205, y desarrollar la RI a partir de un conjunto de capacidades inicial (CS-1) para constituir un CS‑n futuro. También ofrece un marco para la especificación de protocolos RI, como se describe en la Recomendación Q.1208.